*Por Carlos Rivas, Licenciado en Higiene y Seguridad, y Ariel Azofra, Licenciado en Higiene y Seguridad, Gerencia de Prevención, Provincia ART.
Desde el punto de vista físico, sonido y ruido son lo mismo. Cuando el sonido comienza a ser desagradable, cuando no se desea oírlo, se lo llama ruido. La definición de ruido es subjetiva.
¿Cómo medimos el ruido?
El decibel es la unidad de medición y podemos decir que:
- Se basa en el hecho que el oído humano tiene una respuesta al sonido que se parece a una función logarítmica.
- La sensación que se percibe es proporcional al logaritmo de la excitación recibida.
¿De qué depende?
Depende de la dosis que es la cantidad de energía sonora que un trabajador puede recibir durante la jornada laboral y que está determinada por el nivel sonoro continuo equivalente del ruido al que está expuesto y la duración de dicha exposición. El potencial de daño a la audición de un ruido depende tanto de su nivel como de su duración.
¿Cómo se mide?
Existen dos procedimientos para la obtención de la exposición diaria al ruido:
- Por medición directa de la dosis de ruido.
- indirectamente a partir de medición de niveles sonoros equivalentes.
¿Cómo impacta en nuestra salud?
- Malestar.
- Estrés.
- Trastornos del sueño.
- Pérdida de atención.
- Dificultad de comunicación.
- Trastornos psicofísicos.
- Afecciones cardiovasculares.
- Alteración de la conducta.
- Retraso escolar.
- Problemas de convivencia.
- Pérdida de la audición.
Sobre este último punto es importante destacar:
- Hipoacusia conductiva: cualquier trastorno en la conducción del sonido. El sonido ingresa y es conducido a través del oído externo y medio hasta llegar al oído interno.
- Hipoacusia perceptiva: Trastorno en oído interno, nervio auditivo. El sonido llega al oído interno, es percibido y codificado en impulsos neurosensoriales para ser llevado al cerebro.
- Hipoacusia mixta: Si el trastorno actúa en la conducción y en la percepción.
- Hipoacusia central: Afecta a todo el cerebro en general.
- Trauma acústico agudo: Lo produce una energía sonora extrema que daña el sistema coclear.
- Trauma acústico crónico: Lo produce el ruido constante elevado durante la jornada laboral.
Según la OMS:
El ruido es un contaminante ambiental que afecta a la salud de todos los seres humanos en mayor o menor medida. Es acumulativo en el cerebro en una zona denominada “área de Hesch”, ubicada en la parte superior de los lóbulos temporales. Por tal condición, es irreversible y es por eso que debemos protegernos del mismo, en todos los aspectos de nuestras vidas: la prevención social proactiva, empieza con todos nosotros.
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Fuentes consultadas:
Organización Mundial de la Salud (OMS). “Guidelines for Community Noise.” (http://www.who.int/docstore/peh/noise/guidelines2.html). Ginebra, 1999. (Puede verse una traducción española de su Resumen Ejecutivo en http://www.cepis.ops-oms.org/bvsci/e/fulltext/ruido/ruido2.pdf)
1. Catalán, soroll, renou. Eusquera, zarata. Gallego, ruido. Alemán, Lärm, Geräusch. Francés, bruit. Inglés, noise. Italiano, rumore. Portugués, ruído, barulho.
2. Traducimos por “malestar” el término inglés “annoyance” por considerar que se aproxima más a su significado que el de “molestia” que es el empleado habitualmente.
3. Para sonidos impulsivos. Valores dependientes de la duración del sonido y del número de exposiciones al mismo.
