* Por Carlos Alberto Rivas – Lic. En Seguridad e higiene y preventor de Provincia ART.
En la Argentina, las personas que trabajan pasan más de un tercio del día en los ambientes laborales. Estol implica que, por su exposición prolongada y continua, puedan sufrir los efectos del estrés, potenciando la aparición de patologías que luego afectan su salud. Es necesario, entonces, aprender a identificarlo y aplicar técnicas para combatirlo eficazmente.
Estrés (del latínstringere “apretar” a través de su derivado en inglésstress “fatiga de material’) es una reacción fisiológica del organismo, en la que entran en juego diversos mecanismos de defensa para afrontar una situación que se percibe como amenazante o de demanda incrementada.
¿Como identificarlo?
Distrés o estrés negativo: es aquel que supera el potencial de homeostasis o equilibrio del organismo, causando fatiga, mayores niveles de ansiedad, de irritabilidad y de ira. El estrés mantenido puede provocar la aparición de consecuencias físicas, debidas al aumento del gasto de energía, una mayor rapidez de actuación, menor descanso del necesario y el consiguiente agotamiento de las fuerzas.
Síntomas frecuentes:
• Te alterás fácilmente, te frustrás y te encontrás de mal humor.
• Demostrás ira, llanto, depresión, negatividad.
• Te sentís abrumado, que estás perdiendo el control o necesitas tomarlo.
• Tenés dificultad para relajarte y calmar la mente.
• Te sentís mal con vos mismo (baja autoestima), solo, sin valor y deprimido.
• Evitás el contacto social.
• Te inclinás excesivamente a la comida, tabaco, alcohol, drogas.
¿Cómo combatirlo?
• Aprendé a decir “no”.
• Evitá a las personas que te causan estrés y son conflictivos.
• Tomá el control de tu entorno.
• Recortá la lista de tareas pendientes y administrá mejor su tiempo.
• Expresá tus sentimientos, sé más frontal.
• Reformula sus problemas, buscá el lado positivo.
• Ajustá sus normas: no trates de controlar lo incontrolable.
• Revisá tu actitud, estate alerta cada vez que tengas un pensamiento negativo acerca de vos mismo, tu cuerpo reaccionará como si estuviera en medio de una situación llena de tensión.
• Seguí un estilo de vida saludable: hacé ejercicio, pasá más tiempo cerca de la naturaleza, descansá lo suficiente, alimentate saludablemente, escuchá música, dedicá tiempo a relajarte, hacé algo que disfrutes todos los días, mantené tu sentido del humor, reducí la cafeína, la sal y el azúcar, dormí lo suficiente.
Carlos Alberto Rivas – Lic. En Seguridad e higiene.
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